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domingo, 5 de abril de 2009

De la casa de té al hotel del lago


Lectores, los domingos me gustaría compartir con ustedes distintas historias de emprendedores, es una forma de ver como otros logran animarse y cambian rotundamente su vida. No hay que olvidar que son pocos los "emprendedores" que logran triunfar con su proyectos, pero para triunfar se cayeron como mínimo 5 veces pero aún así no bajan los brazos y siguen firmes con sus ideas, estudiándolas y corrigiendo los errores por los cuales no lograron que su empredimiento se sostenga. Entonces, lo que hay hacer es perseverar en sus sueños de emprender y no rendirse.
Hoy les voy comentar una historia de Flavia quién estaba haciendo carrera en una multinacional, pero quería un cambio en su vida. Como le gustaba esquiar, se instaló en Bariloche. Después de un par de intentos que no prosperaron, montó un exitoso resort boutique. A esta historia la encontré en la sección de Clarín denominada iEco y comienza así:

De la casa de té al hotel del lago

Flavia era una ejecutiva joven, bella y exitosa que pese a todo no se sentía feliz y que, con las habilidades que había adquirido en el mundo de los negocios, se planteó otro tipo de vida, montando su propio emprendimiento lejos de la gran ciudad.
Y, por eso, enfiló directamente hacia Bariloche. Tras un par de intentos que no prosperaron, finalmente dio vida a Los Juncos, un resort boutique ubicado a 20 minutos de Cerro Catedral, que facturó algo más de $150.000 en su primer año.
Hasta 2002, antes de lanzarse a su propia aventura, fue gerenta de Producto en la multinacional farmacéutica GlaxoSmithKline.
La posada, como Flavia prefiere llamarla, tiene una capacidad máxima para alojar a diez personas en cinco habitaciones. Esta licenciada en Administración por la UCES usó sus conocimientos para pagarles mejor a las agencias para que le traigan más turistas europeos. O poder ofrecer mejores vinos y a la temperatura adecuada, porque al estar en Bariloche "vivimos calefaccionados", ilustra. Hasta el momento invirtió entre $10.000 y $20.000, pero se trata de una empresa totalmente suya.
Cuando Flavia llegó a Bariloche, se asoció con una amiga en una casa de té, pero tuvieron diferencias de criterio y vendió su parte. Luego investigó el mercado para abrir allí una franquicia de Café Martínez. "No había masa crítica en temporada baja. Nos hubiera ido mal", cuenta. Un diseñador amigo le pidió que la ayudara en la administración de su negocio. "Una casa de 1940, una especie de showroom en materia de diseño. Preciosa, con pisos de ciprés y vista al lago. Lo asesoré dos años, hasta que me pidió que lo ayudara a conseguir un comprador para la propiedad. El no lo podía creer cuando le dije que me interesaba a mí", evoca. Sin embargo, Flavia no se lo planteó comprar. Negoció un contrato de alquiler a 10 años, por un precio mucho más pagable con el flujo de caja y el compromiso de mejorar la propiedad en forma bianual.

Punto de encuentro
La clave de su negocio es el concepto de boutique, que incluye desde una cocina cuidada -con su chef Gaby, quien trabaja para ella en forma free lance, sólo cuando tiene huéspedes que deciden comer allí- hasta el transfer para llegar al cerro, que está incluido en la tarifa. "Esta es una casa de amigos", explica Flavia, "donde los huéspedes se relacionan entre ellos. No tenemos televisor ni teléfonos en las habitaciones, aunque sí wi-fi". Señala que su temporada alta es entre diciembre y febrero.
Su experiencia en el mundo corporativo la decidió a no tener más que una empleada, la que se encarga de la limpieza y los desayunos. "sé lo que es tener que pensar un presupuesto anual sin saber a qué valor calcular el dólar en el corto plazo. Pero no puedo estar sujeta a los vaivenes de un país que cambia algunas reglas de juego", comenta. "Prefiero poner el cuerpo yo misma a tomar cinco empleados y pensar que de la noche a la mañana puedo dejar sin ingresos a cinco familias", añade. Estima que hoy en día sólo llegó al 50% de las posibilidades que se planteó como techo para Los Juncos.

Éxitos Flavia!

Adrián Nardelli.

3 comentarios:

  1. Muy buen articulo, me gusto bastante, un claro ejemplo de emprendimiento.

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  2. Me alegro que te guste Javier! en estos días voy a publicar algunos más que me gustaron... asique te espero por el blog!

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  3. Ok, por aqui estare de visita mas seguido, gracias por compartir parte de tu sabiduria.

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